Dicho sea de paso, aquí algo sobre el proceso del tabaco. Espero lo disfruten y para el que lo quiera en idioma original, también la fuente.
PRESIÓN
Poner el tabaco bajo presión ha sido uno de los procedimientos más comunes durante mucho tiempo para modifica el sabor y las características de combustión de los tabacos de pipa. Al aplicar presión se acelera el intercambio de aromas y puede enriquecer y dar profundidad al sabor, debido a los cambios físicos y químicos que produce. Hay varias formas en las que se puede aplicar la presión:
- Almacenamiento a granel: Cuando las balas de hoja en bruto son apiladas para su almacenamiento, el peso de las propias balas vuelve al tabaco más homogéneo. Por eso es que la hoja de cigarro es almacenada de esta forma, para hacer el sabor más consistente a lo largo del tiempo.
- Presión directa: Así es como se hacen los flakes, cakes y plugs. En el caso de los flakes y plugs la hoja en bruto (con la caña o palillo previamente extraído, aunque no siempre) es colocado en capas, a veces en un orden muy concreto, dentro de un molde, con una máquina aplicando presión sobre el conjunto, produciendo transformaciones de sabor y apariencia y dando como resultado una plancha o bloque. En el caso de los flakes es cortado en rebanadas, mientras que los plugs son envasados sin cortar, permitiendo que el fumador los prepare según sus preferencias. Otra presentación para los flakes es romper parcialmente las rebanadas, de forma que no es necesaria preparación alguna por el fumador. Este modo de presentación es llamado broken flake.
Para los cakes se usa un método similar, pero están hechos con tabaco cortado. La razón de hacerlo así es que se produce una mayor mezcla de sabores entre los diferentes componentes, mientras que los plugs ayudan a mantener los sabores en capas ordenadas. Los cakes pueden también ser pre cortados o servidos como una plancha.
- Cavendish: Si bien este término se ha vuelto vago en los últimos tiempos, se refiere a un método específico de procesar el tabaco. Habitualmente el tabaco es tratado con un “casing” (más últimamente), a veces calentado y prensado durante varios días o semanas. En algunos casos se continúa aplicando calor mientras el tabaco se encuentra a presión. En la mayoría de los casos esto se hace para empapar el tabaco con los sabores añadidos, pero en otros estos sabores son mínimos y el fin del proceso es eliminar las características negativas de la hoja. Al finalizar, las planchas son cortadas en rebanadas y deshechas completamente para romper el tabaco en “ribbon cut” de corta longitud.
- Spun o roll cut: Comienza introduciendo el tabaco en un tubo y sometiéndolo a presión directa. Cuando la barra de tabaco prensado es extraída es envuelta con otros tabacos. Entonces el producto final es cortado en discos, normalmente referidos como “coins” (monedas), para un fácil manejo por el consumidor. Normalmente estas monedas tienen un núcleo visualmente distinto a la parte externa.
- Twist o ropes (torcidos o cuerdas): En este método las hojas son colocadas en capas y posteriormente torcidas firmemente para madurar el tabaco. Es es la causa de que muchos twist y ropes sean bastante fuertes en sabor y contenido nicotínico. El usuario corta la labor en láminas para cargarlas en la pipa o corta trozos gruesos para masticar.
- Procesado Perique: Las hojas, en este caso, son dispuestas en barriles y un tornillo apretando la parte superior del mismo se encarga de realizar la presión suficiente para romper las paredes celulares del tabaco, liberándose sus fluidos. Dichos fluidos fermentan, obteniéndose las peculiares características del tabaco Perique.
CALOR
Aplicar calor al tabaco modifica el sabor del mismo de forma radical o moderada, dependiendo del método aplicado. Incluso algunos fumadores emplean sus propios métodos de aplicación de calor, como puede ser dejar una lata cerrada en el salpicadero del coche para que le dé el sol. Estos son algunos de los métodos que se aplican en la producción:
- Steaming (cocción al vapor): Esto no solo ayuda a caramelizar los azúcares presentes en la hoja, sino que abre sus poros, ayudando a la posterior absorción de casings o dressings.
- Calor Indirecto: Esto es básicamente hornear el tabaco, que se oscurecerá, presentará un sabor más penetrante y sus azúcares se caramelizarán. Es usado habitualmente para eliminar algunas propiedades no deseadas de la hoja.
- Stoving (estofado): Se cocina el tabaco mediante el contacto con una superficie caliente. Imagine una sartén, una plancha o un wok con una fuente de calor por debajo y el tabaco encima. Removido constantemente hasta que se hace, este proceso cambia enormemente el sabor de la hoja. Un ejemplo típico de tabaco procesado de esta forma es el McCleland 5105.
CASING
Es llamado así el proceso de añadir sabores, normalmente de base acuosa, en las fases tempranas del proceso de elaboración. El casing afecta más al sabor que al aroma y en muchos casos se emplea para endulzar tabacos acres o para reducir la acidez y aspereza de algunas hojas, más que para dotarlas de sabor.
TOP DRESSING
Los toppings se añaden a las mezclas con el fin de modificar su aroma, más que su sabor, aunque también tienen influencia en este. Normalmente los dressings (o toppings) está basados en alcochol y se aplican en las fases finales de producción. De este modo los aromas concentrados penetran en las hojas y, al evaporarse el alcohol, queda solo el efecto aromático.
HUMECTANTES
Son productos químicos que se añaden al producto para mantener su grado de humedad, a fin de aumentar su vida de almacenamiento. El más común es el propilen-glicol, un producto de uso alimentario. También se utilizan sorbitol y glicerina que, además, actúan como edulcorantes.
ANTIFÚNGICOS
Pueden ser productos químicos desarrollados para tal fin o puede ser algo tan simple como vinagre. En cualquier caso, la razón de su uso es prevenir la formación de moho mientras está en el envase.
La mayoría de los pipafumadores encuentran no solo aceptable, sino incluso deseable, la aplicación de calor y presión en los tabacos para obtener productos acabados. Yo habitualmente uso uno o ambos procesos. Algunos consumidores, así mismo, confían menos en la aplicación de aditivos de cualquier clase. Dado que la mayoría de los tabacos “no saborizados” contienen, a pesar de todo, algún tipo de casing y antifúngico y que la mayoría de los fumadores son incapaces de detectarlos, deberían ser considerados inocuos. El debate se centra mayoritariamente en el empleo de toppings y humectantes.
Los dressings tienen su lugar. La mayoría de los pipafumadores americanos consume tabacos aromáticos y sin los toppings estos tabacos serían casi imposibles. Y si alguna vez se ha quedado sin tabaco o se le ha olvidado en casa y ha tenido que comprarlo en un supermercado o tienda de conveniencia, ha de agradecérselo a los humectantes. La mayoría de los tabacos envasados en bolsas o pouch no duraría dos meses sin ellos.
Estas son algunos de los procesos a los que se somete al tabaco que fuma y que quizá no conociera. Puede estar seguro de que, por la profesionalidad de los fabricantes y la supervisión de varias agencias, ninguno de estos procesos resulta peligroso para la salud y no debería tener efectos negativos sobre las labores.
FUENTE ORIGINAL:
http://pipesmagazine.com/blog/put-that-in-your-pipe/oh-the-things-well-do-for-pipe-tobacco/
