Todos hablamos de gastromonia en este post, pero también se refiere a "servicios". Y en el Abra Vieja, unos metros antes de su desembocadura en el Sarmiento, hay una Ferrtería "atendida por su dueño". El tipo es un verdadero pingazo, a cualquier hora siempre te atiende bien y con una sonrisa y buenos consejos. Por ahí a algunos les queda lejos, pero hay que hacerle el honor a una de esas personas que ya no es fácil encontrar.