Los videos son de una tarde de remo por el Santa Rosa, y las fotos son de la zona de Saucelandia, donde tengo buenos amigos y amarro mi canoa. Concretamente, son fotos de los jardines de algunas lindas casas en las márgenes del Sarmiento, entre Tres Bocas y el San Antonio.
Efectivamente, Monina, he observado que en la isla al taxodio se le dice ciprés calvo, ya que es la única conífera de hoja caduca. Un árbol fascinante, excelente protector de costas y muy apto para zonas inundables, porque hace brotar de sus raíces sus raros "pulmones" (para desesperación de jardineros), por los que respira y así evita ahogarse.
He visto varios ginkgos por allí, con su insólita hoja en forma de abanico que se luce mucho más en otoño, cuando adquiere ese amarillo oro tan agradable.
Viví hace años frente a la plaza de Munro, que estaba rodeada de ginkgos muy grandes (los podaron salvajemente, y son muy lentos para crecer), y cuando daban su fruto aparecían los japoneses a recogerlos, según dicen para hacer un té para vivir muchos años (acabo de leer que también es muy bueno contra la depresión, para la memoria y... el buen sexo!).
No sé si sabían que el ginkgo biloba es un fósil viviente (relicto), es decir que se encuentran restos fósiles de sus troncos y hojas, pero aún sigue existiendo.
Un abrazo,
Osvaldo.