Gracias Adriana por las voces de aliento; y la Tasca de Manuel está hermosa y renovada. Pago una ronda de jerez a esta ahora para el aperitivo, mientras Carapa nos cuenta cómo sucedió el accidente (para prevenir otros accidentes, digo). UN GRAN ABRAZO.

La tasca de Manolo NO ESTA EN VENTA. Organizemos piquete isleño en el muelle, joder. Estuve el largo finde en la Isla y lo dissfruté como nunca. Que lo parió la tormenta y que lo parió La Plata, que desgracia. Los de este lau del río estamos con ellos.

Estás en el horno, Mare:  te picó fuerte el virus del Mal del Sauce. Entregate nomás. Pronto te vas a dar cuenta que los demás son zombies en la niebla, y que el único que mira la realidad del mundo sos vos, y tu familia que se bancó la experiencia. Bienvenido a las Islas. Es el río el que te elige. Y a vos te marcaron fuerte. Linda historia la tuya, para contar a los nietos. Arthur Miller escribió: la guerra y el amor es una experiencia que se vive, y no puede transmitirse. Usted puede agregar: y la vida en las Islas del Delta.

CHe Manolo, la verdá una tristeza la soledad del bar. Se me arruga el corazón de verlo así. Una abrazo a los de siempre.-

Un poco de movimiento en la barra me alegra. Tenia un poco de miedo de quedarme solo y a  los gritos, un Tarzán isleño que le dicen. Veníte Manolo te cuento: el domingo pasado me quedé sin motor en la vieja PLUIE justo en el muelle del Club Banco Provincia )Rio Capitán). Las autoridades )para decirlo de alguna manera) miraban con cara torcida, tres de la tarde y bajo el sol, pero los muchachos del galpón se arremangaron para darme una mano. El motor no arrancó ni de pedo, pero los tres laburantes hicieron todo lo posible y no me aceptaron propina. Buena gente; en el rio no se deja a nadie de a pie. Dejo un vino para ellos.- Y a la Patry gracias por la picada.

GAllego. hace quince días que el boliche está cerrado. Refacciones? Vacaciones en la costa con Amparito? Y con el repunte del sábado te llevaron las mesas a flote? Que pasa, Manolo, andan ofendidas las chicas? Dejo un saludo para la comunidá, siempre presente.

Charlieff, amigo, anduve leyendo sus textos y le felicito y le agradezco nueva y públicamente la generosidá de traer de sus memoria esos momentos. Leyó a Soriano en ¿Cuentos de nuestros años felices?´

Charlieff capo maestro. Cuente un poco, cuente e ilustre acerca de su premio literario y ande se puede leer la obra que, sin duda, enriquecerá la biblioteca comunitaria. En el mientras tanto, acá estamos con las señora Mo, a la espera de sus noticias, preparando canapés para la muchachada.