O sea, reclamar lo que la ley establece como derechos laborales con raigrambre constitucional (no olvidar la del '49), y quizás por ser antiguamente profesiones a las que accedían personas sin ninguna otra preparación que su fuerza de trabajo -fuerza bruta quizás para muchos, no merecerían llamarse trabajadores, sino mas bien sirvientes...
Gente que permanecía en un sector laboral marginal, como mano de obra barata a la que se podía recurrir como a un bolsero a comprar artículos muy baratos y sin mayor compromiso...
Buehhhh... se están cambiando muchas costumbres...